Alberto
Vila
Alberto
Vila nació en Montevideo el 25 de setiembre de 1903 y murió en la misma ciudad,
donde ya no estaba radicado, sino que se encontraba de paso, el 23 de febrero
de 1981.
Fue
principalmente un galán cantor. Su coterráneo, el memorioso investigador
Horacio Loriente, recuerda que la carrera de Vila comenzó luego de un ensayo
privado de la famosa Troupe Ateniense dirigida por Víctor Soliño, Roberto
Tontaina y Ramón Collazo (El Loro). Con esa Troupe debutó en el teatro
"Solís", de Montevideo, el 6 de octubre de 1927, haciendo imitaciones
de Carlos Gardel. Semanas más tarde, el 27 de diciembre, se presentó en el
teatro "Coliseo" de Buenos Aires, Su viaje a ésta, precedido de referencias
encomiásticas, valió al apuesto cantor, de voz profunda y pastosa, afinado y
expresivo, un contrato con la grabadora Víctor, para la que registró, el 3 de
diciembre, cuatro pía-cas: Ensueño, de Manzi y Sureda; Perdónala, de Soliño,
Tontaina y Agnese; Niño bien, de Soliño, Fontaina y Juan A. Collazo, y Che,
papusa, oí, una letra de Enrique Cadícamo a la que puso música Gerardo Matos
Rodríguez (la relación entre músico y letrista no prosperó porque Cadícamo,
sabedor de que en una primera instancia Matos había dudado de los méritos de la
letra, le retiró el saludo). Desde entonces y hasta 1942, cuando dio por
finalizada su carrera discográfica, Alberto Vila registró ciento tres
composiciones, según los rigurosos cómputos del infatigable Roberto Gutiérrez
Miglio; cantidad más bien exigua, si se consideran sus aptitudes y su renombre.
La
actividad de Vila superó los carriles habituales gracias a las condiciones de
actor y de cantante que los cineastas le descubrieron. Fue, ciertamente,
estrella de la radiofonía, lo mismo en el Uruguay y en la Argentina, y lo
convocaron, como a tantos ilustres artistas, al famoso y consagratorio teatro
"Empire" (esquina noroeste de Maipú y Corrientes), donde en 1929
compartió el cartel con la entonces famosísima Josephine Baker, Su actividad
cesó, sin embargo, en 1946» después de actuar en su última película. Doce filmó
en diez años, desde Radio Bar (1936, director Manuel Romero), hasta Adiós,
pampa mía (1946, también de Romero), Su filmografía incluye Sucedió en la
Argentina (1942), rodada en Hollywood, con Maureen O'Hara como protagonista. En
esa película canta en inglés y en castellano, acompañado por una orquesta que
dirigía Lud Gluskin.
También
cabe mencionar dos filmes uruguayos, Soltero soy feliz (1938), con Ramón Collazo,
y Los tres mosqueteros (1943), con Iris Marga, quien había debutado en el cine
argentino en Petróleo (1940) del director Arturo Moma. Recuerda Loriente que
las principales escenas de Los tres mosqueteros fueron registradas en las
escalinatas del parque Capurro, de Montevideo. Asimismo ha de recordarse su
participación en una de las más bellas películas argentinas, La casa del
recuerdo (1940, dirigida por Luis Saslavsky), en la que entona a dúo con
Libertad Lamarque una agradable canción lamentablemente no llevada al disco.
Julio
Sosa y Alberto Vila fueron, sin duda, los dos mayores cantores de tangos
nacidos en la otra banda, cada uno con su personalidad y sus méritos, óptimos
intérpretes de las canciones de acento recio (Brindis de sangre, Che, papusa, oí)
f como de aquellas otras en las que letra y melodía exigen una expresión tierna
y melancólica (Margo, Sueno de juventud). En una carrera discográfica de quince
años Vila grabó 103 registros; la de Sosa se prolongó durante dieciocho años y
acumuló 144 grabaciones.